UN DIA DE MERCADO EN LA PLAZA PRINCIPAL

  Se representa una realidad en la cual ocurre en el típico pueblo pequeño y un poco pobre, con sus borrachos, sus charlatanes y sus señores agrandados; con costumbres hogareñas, familiares y pueblerinas arraigadas de manera muy fuerte, de manera que se ve reflejado las antiguas ferias donde las personas disfrutaban de toda una aventura a la hora de ir a hacer sus compras, se compartía y vacilaba con las demás personas que asistían a la plaza, donde las abuelas llevaban a sus nietos a que les ayudara con las compras de toda la semana; los vendedores y señores del pueblo viajaban en su carreta.

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   En el cuento un día de mercado en la plaza principal nos representa un país de gente campesina, madrugadora, trabajadora y de costumbres hace muchos años las personas veían su ida a la plaza del pueblo como una tradición, una manera de conservar sus creencias y además que era la única manera de conseguir sus bienes sin tener que pagar una exageración de dinero para su subsistencia, eran personas sencillas que no se sentían superior a nadie y que por el contrario se conocían unos a otros, compartían e intercambiaban (ósea negociaban hasta los precios). Eran ciudadanos de bajos recursos que contaban con sus ingresos contados, otro factor importante es el respeto que se tenía hacia las personas mayores, Dios nos librará de tan siquiera decir que no, porque se venía el castigo.

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Se refleja un antes y un ahora era muy diferente , en donde a las personas ya no les gusta ir tanto a la feria, prefieren ir a los supermercados o simplemente no ir, en donde ya no se interactúa con los demás visitantes del mercado, ya no se ven los objetos o productos religiosos buscados por los parroquianos. También en las palabras, las cuales se usaban en un vocabulario propio de la época y la localización geográfica del entorno; y actualmente se sigue esa tradición de visitar el mercado pero sin la magia que la caracterizaba en años pasados.